Señor Director:
La Corte Suprema fue directa: no hay nada que aclarar. Con esta declaración, las isapres deben desembolsar a todos sus afiliados más de 1.400 millones de dólares por concepto de cobros excesivos, tras la adecuación a la tabla única de factores.
Pero más que analizar números, hay que prestar atención a los más perjudicados con toda esta debacle: las personas. La reforma de la salud es un asunto que se viene hablando desde hace muchos gobiernos, pero ninguno se hizo cargo de este sistema de salud que pedía a gritos cambios para poder resistir la demanda con calidad y eficiencia sin cobros excesivos.
Las isapres tienen que entender que el escenario cambió y deben adaptar sus procesos a ello. Hoy existen las tecnologías que pueden contribuir a eficientizar y bajar sus costos. Tecnología como machine and learning e inteligencia artificial para repensar las experiencias y productos que apunten a aumentar la satisfacción de los ya incrédulos afiliados.
Eliminar a las isapres o al sistema privado de salud no es la solución, sino lograr el equilibrio en beneficio del bienestar de las personas. No perdamos ese foco.
Esta carta fue publicada el 23 de junio en Diario Financiero.
